No exijas el aire con temperaturas muy bajas
Elegir una temperatura ideal para la habitación también permite ahorrar consumo energético, ya que las temperaturas demasiado bajas generan una mayor exigencia del artefacto, y por ende mayor consumo. En general se recomienda 24° grados.
Instalación y mantenimiento
Procura colocar el aire acondicionado en un lugar alejado de posibles fuentes de calor (radiación solar, etc.) y con una buena circulación del aire.
Revisa que las entradas y salidas del aire acondicionado no esten siendo obstruidas, es importante revises periodicamente que esten libres de suciedad, polvo y objetos extraños. También controla la limpieza de los filtros que dispone el equipo. | Gestión del riesgo
Usar ventiladores
El uso de ventiladores puede ayudar a crear una brisa constante que va a mantener la casa fresca. Otro truco que podemos llevar a cabo es llenar un recipiente con hielo y colocarlo cerca de un ventilador. El aire fresco de la superficie del hielo se propagará creando un efecto de fresco adicional.
Apagar las luces
Tener una gran cantidad de luces encendidas dentro de la vivienda hará que la temperatura del interior de la vivienda se incremente. Si a esto le sumamos el sol que pueda entrar por la ventana, el aumento puede ser todavía más importante.
Acondiciona tu casa para que sea más fresca
Se puede reducir el consumo de energía del aire acondicionado hasta en un 30% reduciendo la entrada de calor en la habitación mediante el uso de toldos, persianas o cortinas en aquellas superficies acristaladas.
Finalmente, aprender a aprovechar los recursos de la naturaleza es la regla básica del ahorro de consumo eléctrico, por eso se debe aprovechar en verano el aire de las primeras horas de la mañana o urante la noche, para ventilar la casa.
Fuente: Nuevo Diario Web